INTRODUCCIÓN Y OBJETIVOS

Nacido en Mallorca el 1895, Emili Darder i Cànaves diseñó e impulsó campañas de divulgación de higiene y prevención de enfermedades, trabajó en la mejora de las infraestructuras educativas, de las condiciones de vida de la población trabajadora y mostró también un compromiso cultural a través de la participación y presidencia de la Associació per la Cultura de Mallorca. Encarcelado después del golpe de estado y con una frágil salud, fue fusilado el 24 de febrero de 1937, a los 41 años. Su vida y obra, con un evidente carácter modernizador, trascendieron su muerte y hoy representan un legado que tiene que difundirse entre los estudiantes y la sociedad civil en general.

Objetivo principal

·         Diseñar una ruta cultural como estrategia didáctica para la enseñanza y aprendizaje de la Historia entre el alumnado del Grado en Educación Primaria.

Objetivos específicos

·         Implementar experiencias de enseñanza y aprendizaje de la Historia contemporánea a través de la memoria democrática.

·         Profundizar en el estudio biográfico de Emili Darder i Cànaves como estrategia de adquisición de contenidos curriculares, procedimentales y actitudinales.

·         Mejorar el conocimiento del entorno al alumnado, en este caso, de la ciudad de Palma, a través de lugares de memoria vinculados a la Segunda república y la Guerra Civil española.

TRANSITAR E HISTORIAR EL ESPACIO A TRAVÉS DE LOS LUGARES DE MEMORIA

El concepto «Lugares de Memoria» fue acuñado por Pierre Nora en los ochenta, en un proceso de renovación historiográfica vivido en Francia. A pesar de que no estuvo exento de críticas, el éxito de su trabajo fue notorio al visualizar una serie de lugares, objetos y prácticas que hicieron posible profundizar en el conocimiento de los colectivos humanos con el pasado. Es decir, los Lugares de Memoria representan un conjunto heterogéneo de elementos que favorecen el conocimiento de la memoria colectiva.

Francisco Ferrándiz (2011), siguiendo los postulados de Nora, explica que los Lugares de Memoria podrían dividirse en tres ejes básicos: materiales, simbólicos y funcionales. En estas categorías se podrían circunscribir aspectos tan variados como por ejemplo monumentos, archivos, símbolos, conmemoraciones o cementerios, entre otros.

Para Albert Balcells (2008) un Lugar de Memoria es un espacio o monumento, material y definido, dotado de capacidad conmemorativa, en cuyo alrededor se desarrollan rituales civiles de contenido político. Ya sea tomando una definición más o menos amplia, tanto Balcells (2008) cómo Ferrándiz (2011) señalan que los Lugares de Memoria cambian y evolucionan y pueden revitalizarse o caer en decadencia, influidos por la administración pública y la sociedad civil.

La premisa principal en el diseño del itinerario consiste en que los Lugares de Memoria nos ayudan a reconstruir una geografía de la Segunda República, de la represión vinculada a la Guerra Civil española, así como de la recuperación de la memoria democrática, para ofrecer al alumnado una aproximación científica basada en una didáctica crítica y en conexión entre el pasado y el presente.

Es decir, los Lugares de Memoria tienen un valor formativo destacado y nos permiten desarrollar múltiples opciones en los procesos de enseñanza y aprendizaje de las Ciencias Sociales, concretamente de la Historia. Los lugares vinculados a la represión y los lugares reinterpretados desde la óptica de la Memoria Democrática son espacios de transmisión de valores como la libertad, la justicia y los derechos humanos. Se trata de escenarios que relatan una historia en mayúsculas, reconstruida a través de la metodología científica, y a la vez son escenarios de memorias individuales.

Es necesario no olvidar que el proceso de recuperación de la memoria implica un trabajo científico y a la vez de difusión pública, a través de actividades tan diversas como la investigación histórica y la contrastación de fuentes, la protección del espacio, la señalización y la divulgación.

En este trabajo se reconstruye la biografía de quién fue alcalde de la ciudad de Palma en el momento del golpe de estado en 1936 a través de un itinerario didáctico que recorre varios Lugares de Memoria en la capital balear. Se trata de una ruta que nos permite transitar e historiar el espacio partiendo de una base biográfica, diseñando un mapa de la represión y de la recuperación de la Memoria Democrática.

Cómo indica Ángel Liceras (2018), los itinerarios didácticos en sí mismos ya no representan una metodología innovadora, si bien continúan representando ¾siempre que cuenten con una preparación correcta¾ un recurso destacado en los procesos de enseñanza-aprendizaje de las Ciencias Sociales, al favorecer el desarrollo de competencias conceptuales, procedimentales, actitudinales, sociales y cívicas. Al análisis de Liceras nos gustaría añadir e incidir que en el diseño de itinerarios hay que tener presentes dos aspectos fundamentales: el primero es dar valor y ofrecer una perspectiva interdisciplinaria. El segundo elemento a tener en cuenta, al trabajar un itinerario desde la perspectiva de la Memoria Democrática, es que las investigaciones históricas son el punto de partida obligatorio ante cualquier propuesta. En otras palabras: el trabajo histórico-científico es el que da sentido a la didáctica de la memoria democrática, basada siempre en hechos verídicos y verificables. Defendemos una pedagogía que ponga en valor los conocimientos históricos, más allá de fórmulas didácticas vacías de contenido.

 EL LEGADO POLÍTICO, SOCIAL Y CULTURAL DE EMILI DARDER I CÀNAVES A TRAVÉS DE UN ITINERARIO DIDÁCTICO

La figura de Emili Darder i Cànaves ha sido objeto de estudio y difusión por parte de varios investigadores, como Sebastià Serra (2001), Arnau Company (2008) y Lina Moner (2012), que han dado a conocer su trayectoria vital como médico, como político comprometido con las mejoras sanitarias, educativas y culturales en Palma y como represaliado a raíz del golpe de estado de 1936. La intensa y comprometida tarea de quien fue edil y alcalde de Palma se traduce en un amplio conjunto de fuentes bibliográficas y primarias que permiten al docente desarrollar una experiencia didáctica significativa y de carácter interdisciplinario.

Esta propuesta se basa en un itinerario que, a través de varios Lugares de Memoria, reconstruye la biografía de Darder. Se trabajan, por tanto, contenidos históricos relativos a la Segunda República y la Guerra Civil española y se incide en el proceso de recuperación de la memoria democrática. A continuación, detallamos los Lugares de Memoria que configuran el recorrido y que se pondrán en relación con los episodios biográficos más destacados.

No obstante, hay que tener en cuenta que la ruta puede configurarse teniendo en cuenta otros espacios que, si bien no se encuentran señalizados de manera específica, formaron también parte del periplo vital de Darder.

En nuestra propuesta, el esquema de visita es el siguiente:

Lugar de Memoria         Ubicación geográfica               Distancia y transporte         Duración     Accesibilidad

Busto de Emili Darder    Plaça de la Porta des Camp     Punto de inicio de la ruta   15 m.          Sin barreras arquitectónicas

Piedra de la Memoria     Plaça de Cort                          A 650 metros a pie             15 m.          Sin barreras arquitectónicas

Castillo de Bellver         C. de Camilo José Cela, s/n     A 3,8 km en transporte       5 m.           Si en la Torre del’Homenatge 

Muro de la Memoria       Cementeri de Palma                A 4,6 km en transporte       45 m.         Sin barreras arquitectónicas

Las fuentes bibliográficas para la reconstrucción de la biografía de Darder que encontramos en las siguientes páginas son, fundamentalmente, las investigaciones de Arnau Company (2008) y Lina Moner (2012), referenciadas al final del texto.

 

EMILI DARDER, MÉDICO Y HOMBRE COMPROMETIDO CON LA CULTURA

Parada 1. Busto de Emili Darder en la plaça de la Porta des Camp

En febrero de 2020, coincidiendo con el octogésimo tercero aniversario del fusilamiento de Emili Darder y la celebración del Día del Recuerdo a las Víctimas de la Guerra Civil y del franquismo, se inauguró el busto del último alcalde republicano de Palma en la plaça de la Porta des Camp, a pocos metros del que fue su domicilio y sede del laboratorio particular de análisis clínicos. El busto de bronce, obra de Eduard Servera, fue una donación de la Associació d’Amics i Amigues de Son Sardina i Sa Garriga.

El 20 de junio de 1895, en la calle de Can Vallori n.º 18, nació a las cinco de la tarde Emili Darder i Cànaves. Como exponen Company (2008) y Moner (2012), Emili Darder nació en el seno de una familia acomodada (los otros hermanos estudiaron Medicina, Veterinaria y Farmacia). Estudió en el Colegio Montesión y en el Instituto Balear, y, siguiendo la trayectoria de su padre, realizó estudios universitarios de Medicina en Barcelona, Madrid y València entre 1909 y 1915.

Durante aquellos años de formación montó un laboratorio de análisis, impulsado por su vocación como médico y como investigador, donde consiguió diagnosticar una enfermedad rara (coccidiosis hepática, producida por las esporas de un parásito) apenas conocida en España.

Cuando acabó los estudios en Valencia marchó a Madrid, donde en 1918 se doctoró, especializándose en análisis clínicos. En este periodo se formó con especialistas como el doctor Nicolás Achúcarro Lund en su laboratorio neuropatológico, y en el Instituto Nacional de Higiene con el doctor Gustavo Pittaluga Fattorini, introductor de la hematología moderna en el Estado español. Una vez obtuvo el doctorado, Emili Darder se trasladó a Barcelona, donde trabajó en el Laboratorio Municipal.

Así pues, en los primeros años como médico y de consolidación de su formación, Emili Darder trabajó con varios médicos y centros de referencia de la época, y en febrero de 1918 entró a formar parte del Colegio Oficial de Médicos de Baleares. Darder asistió a numerosas conferencias.

Antes de empezar la década de los veinte su Laboratorio Químico-Microbiológico ya era un referente, no sólo en Palma sino en el conjunto de la isla, y en 1921 lo trasladó a su domicilio, a escasos metros de la plaça de la Porta des Camp, en la calle de Antoni Planas. En el laboratorio, además de sus investigaciones, llevó a cabo varias conferencias, como las dedicadas al tema de la sífilis. Así mismo, Darder colaboró en el Boletín del Colegio Provincial de Médicos de Baleares, desde 1923 actuó como asesor en cuestiones sanitarias de ciudad con el alcalde y arquitecto Guillem Forteza Piña, y en 1925 llevó a cabo un estudio sobre el paludismo en Mallorca que se presentó en la Comisión de Higiene de la Sociedad de Naciones.

En el ámbito estrictamente privado, hay que destacar que en 1921 nació su única hija, Emilia Darder Rovira, fruto de su matrimonio el año anterior con Miquela Rovira Sellarés.

Durante la década de los años veinte se consolidó su trayectoria profesional, destacando su traslado a París para especializarse en enfermedades infecciosas (en centros como el Instituto Louis Pasteur), su nombramiento como académico de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Palma y la incorporación en 1927, por oposición, al Instituto Provincial de Higiene, a la sección de Epidemiología y Desinfección (después de una permuta con la plaza que consiguió en Alacant).

Como encargado de Epidemiología y Desinfección, además de mantener el laboratorio en su propio domicilio, Emili Darder impulsó una notable tarea de investigación, divulgación sanitaria y prevención de enfermedades infecciosas y vacunación.

Por un lado analizó la situación sanitaria de la isla, con el objetivo de ofrecer respuestas a las necesidades médicas de la población. Para conseguir este análisis, Darder trabajó con cifras estadísticas y puso en marcha carnés para declarar enfermedades infecciones, además de visitar varios pueblos (Alcúdia por escarlatina, Santa Margalida, Algaida, Sóller, Binissalem, Llubí…) para hacer frente a varias epidemias y rebrotes.

Por otro lado, Darder impulsó la divulgación sanitaria a través de publicaciones en prensa, conferencias, etc. Durante la década de los veinte realizó un estudio titulado La lluita contra les malalties evitables, que divulgó en varias publicaciones.

Entre las enfermedades de la época destacaron la gripe, la tuberculosis, la sífilis, el paludismo y la difteria (de esta última, por ejemplo, hizo promoción activa de la vacunación entre los niños).

Después de la caída de la dictadura de Primo de Rivera, se vivieron meses de efervescencia política entre los sectores progresistas. La participación política de Darder como miembro del Partido Republicano Federal de Mallorca vivió una etapa de crecimiento, y en paralelo mantuvo la tarea médica y de divulgación higiénico-sanitaria, hasta llegar a organizar una exposición de Higiene Social organizada por la Associació per la Cultura de Mallorca. También mantuvo la propaganda sanitaria, a través de campañas sobre vacunación antitifódica y antidiftérica, y enseñaba a la población cómo podía enfermar de fiebres tifoideas a través de agua contaminada, motivo por el cual era fundamental mantener pozos y cisternas en buenas condiciones, crear redes de alcantarillado y construir depósitos de aguas sucias impermeables.

La primera parada de la ruta, a través del busto ubicado en las proximidades de su domicilio y laboratorio, nos permite profundizar en la perspectiva de Darder como médico comprometido con las condiciones higiénico-sanitarias de la población, especialmente de los sectores más desfavorecidos. Además, su domicilio fue expropiado una vez iniciada la Guerra y es actualmente propiedad del Ministerio de Defensa; actualmente hay una campaña que reivindica su devolución y transformación en centro cívico.

Las elecciones municipales del 12 de abril del 1931 condujeron a Emili Darder a ocupar el cargo de edil en el Ayuntamiento de Palma, hecho histórico que nos dirige al segundo punto del itinerario.

De camino al Ayuntamiento encontramos la calle dels Socors, donde estuvo la sede de la Associació per la Cultura de Mallorca.

Cultura

En esta misma etapa de juventud, Emili Darder mostró su interés por la identidad cultural e histórica de la isla impulsando en 1917, con otros compañeros, la publicación de la revista Mallorca. El primer número apareció el 8 de noviembre de 1917 y fue imprimido en la calle de Sant Miquel, en la Tipografía-Litografía de la viuda de G. Ordinas. La publicación era de talante liberal, abierta a tendencias internacionales, tanto en cuanto a ciencia como cultura, y pretendía la modernización de la isla desde varios puntos de vista (cultural, social…). A pesar del impulso de los jóvenes responsables, en junio de 1918 se dejó de publicar.

Más de una vez, Darder lamentó la inferioridad cultural de la isla, que atribuía al individualismo que percibía entre la población, comparándola con Menorca, que contaba con el Ateneu de Maó, e Ibiza, que disponía del Museo Arqueológico, como núcleos generadores de cultura.

Quizás su análisis crítico propició que en 1923 participara en la fundación de la Associació per la Cultura de Mallorca, de la cual fue vocal, vicepresidente y entre 1925 y 1926, presidente. La primera sede social de la entidad estuvo en la calle del Bisbe Maura n.º 2, y en 1924 pasó al calle dels Socors, n.º 62, en el antiguo colegio de los Padres Agustinos. Sabemos que en 1930 el local estaba en la calle del Palau n.º 40, donde se llevó a cabo la Exposición de Higiene Social (Company, 2011).

La Associació per la Cultura de Mallorca se centró en la divulgación cultural a través de cursillos, conferencias, exposiciones… También actuó como entidad editora del boletín Associació per la Cultura de Mallorca. Quadern mensual, entre otras publicaciones.

Durante la presidencia de Darder se organizaron actos de homenaje a escritores como Miquel Costa i Llobera, Marian Aguiló, y se organizaron los Juegos Florales.

Cómo destaca Company (2008), en las actividades y publicaciones derivadas de esta entidad, Emili Darder incidió en numerosos aspectos sanitarios como la importancia de los hábitos higiénicos, divulgó mecanismos para frenar la propagación de microbios, impulsó una campaña contra enfermedades venéreas, expuso los efectos nocivos del alcohol y denunció la higiene urbana deficiente, entre otros aspectos.

La Associació per la Cultura de Mallorca, fundada meses antes del golpe de estado de Primo de Rivera, tuvo dificultades para llevar a cabo sus actividades de promoción de la lengua y cultura catalanas.

 A pesar de todo, la Associació per la Cultura de Mallorca mantuvo la edición de Quadern Mensual (mayo 1923-diciembre 1925, con un total de 26 números), redactado en catalán y con monografías sobre personajes destacados de la isla. También se mantuvo Almanac de les Lletres, publicación anual editada por la Associació per la Cultura de Mallorca e impresa en Sóller entre 1921 y 1936. Cada número contendía información cultural, miscelánea literaria, etc., con colaboradores como Joan Alcover, entre otros. Era una publicación redactada íntegramente en catalán.

Otro hecho notable en el ámbito cultural fue la aparición de la revista de alta cultura La Nostra Terra, iniciada en enero de 1928 y publicada hasta junio de 1936, y que sufrió la censura. A partir de 1930 esta revista fue el órgano de expresión para la Associació per la Cultura de Mallorca. También estaba redactada en catalán de manera íntegra y defendía el autonomismo nacionalista, además de representar un esfuerzo para llevar a cabo una modernización política y cultural a la isla. La Nostra Tierra se encontró con las reticencias y el control del gobernador civil de las Baleares (Pere Lloses Badia) desde el momento de su aparición. Lloses sabía que la publicación no era partidaria del régimen y que a través de sus páginas podía alterar la calma política de Mallorca, de forma que optó para revisar todas las galeradas de los números que aparecieron mientras ocupó el cargo (un total de 25).

Espacios vinculados a la vertiente cultural de Emili Darder

·         Círculo Mallorquín. Emili Darder fue bibliotecario del Círculo Mallorquín entre octubre de 1929 y febrero de 1932, cargo a través del cual impulsó la biblioteca con la adquisición de nuevas obras y la suscripción a publicaciones. Durante estos años el presidente fue el abogado Antoni Pou Reus (republicano) y Darder fue miembro de la dirección del CM (Company, 2011).

·         Teatro Lírico. Como presidente de la Asociación para la Cultura de Mallorca, Emili Darder impulsó la Juventud Escolar, creada en 1930 y presidida por el maestro Joan Sanxo Llodrà. La Juventud Escolar era dependiente de la Associació per la Cultura de Mallorca y estaba dedicada al fomento de la lengua y cultura. Emili Darder y Gabriel Alomar, el 30 de noviembre de 1930, presentaron la entidad en el Teatro Lírico. En esta presentación, Darder manifestó las siguientes palabras:

 «I si no hi ha més que un mitjà per fer ciutadans, que és la cultura, resulta que la tasca bàsica és fer cultura. Sí, fer cultura, cultura i cultura. Sempre hem entès que és el nostre deure de tots els llocs i de tots els instants.» (Company, 2011)

 

EMILI DARDER Y LA VERTIENTE POLÍTICA

Parada 2. Stolpersteine o piedra de la memoria ante el Ayuntamiento de Palma

Las Stolpersteine o piedras de la memoria son pequeños monumentos de forma cúbica, de unos 10 x 10 centímetros, obra del artista alemán Gunter Demnig. Inicialmente surgieron en honor a víctimas del nazismo, en color dorado, y posteriormente también se han realizado piedras de la memoria en color plateado en honor a víctimas del franquismo. Las Illes Balears son la primera comunidad autónoma del Estado español que ha desarrollado esta iniciativa.

En las piedras de la memoria se graba el nombre de la víctima, fecha de nacimiento, datos de deportación o encarcelamiento y fecha de defunción o liberación, y se colocan en las aceras, ya sea al lugar de residencia o de trabajo de las víctimas, con el objetivo de captar la atención de los transeúntes.

La piedra de la memoria en honor a Emili Darder se encuentra ubicada ante la fachada del Ayuntamiento de Palma, en la plaça de Cort, y fue colocada durante el mes de diciembre de 2018. En la leyenda puede leerse: «Aquí treballà el batle Emili Darder Cànaves / Nascut 1895 / Detingut 20.7.1936 / Pres a Castell de Bellver / Assassinat 24.2.1937 / Palma».

Este Lugar de Memoria, siguiendo las investigaciones de Company (2008) y Moner (2012), nos permite introducir el análisis del perfil político de Emili Darder, primero como edil y posteriormente como alcalde de la ciudad.

Como militante del Partido Republicano Federal, Darder fue elegido edil del Ayuntamiento de Palma y asumió la presidencia de la Comisión Municipal de Fomento, Beneficencia y Sanidad, y la presidencia de la Comisión de Cultura, desde las cuales impulsó la modernización de la ciudad mediante un Plan de Reorganización de los Servicios Sanitarios y un Plan de Construcciones Escolares.

Desde la Comisión Municipal de Fomento, Beneficencia y Sanidad, Darder impulsó políticas de higiene social dirigidas a educar las clases populares en materia sanitaria y reivindicó el acondicionamiento de las viviendas para mejorar la salubridad. También consideró que tenían que mejorarse las condiciones de vida de la mujer al entender que esto revertiría en una mejora de la situación infantil; así mismo, empezó a hacer un seguimiento de las mujeres durante el embarazo y el postparto, hecho que representó, como indica Moner (2012) un elemento innovador.

Por otro lado, los enfermos de tuberculosis, cáncer, enfermedades venéreas y mentales recibieron también una atención especial por parte de Emili Darder.

La reorganización de los servicios sanitarios se materializó en varios dispensarios a la ciudad, así como en la mejora en el abastecimiento, la depuración y la canalización de agua potable.

Además, a través del Plan de Reorganización de los Servicios Sanitarios se trató de mejorar la alimentación de los ciudadanos municipalizando los servicios del matadero y creando un Servicio de Inspección Médica y Veterinaria que actuaba en mercados y mataderos.

En junio de 1934, siendo alcalde, Emili Darder inauguró el Dispensario Central, situado en los bajos de la Casa de la Vila. Se ofrecían servicios de inspección médica escolar, de otorrinolaringología, odontología, oftalmología, psiquiatría, maternología e infancia, e incluso había un aparato de rayos X (Company, 2011).

En cuanto al ámbito cultural, Moner (2012) pone énfasis en que el consistorio estaba gestionado por un número destacado de intelectuales, y en consecuencia la cultura era entendida como un elemento de progreso y de modernidad esencial para la creación de ciudadanos libres.

Emili Darder, firme defensor de estos valores, encabezó la Comisión de Cultura entre el 1931 y el 1934, años en los que se impulsó la adecuación sanitaria de edificios escolares, la construcción de nuevas escuelas siguiendo los postulados higienistas y la aplicación de nuevos métodos pedagógicos. Durante los años previos a la República el número de escuelas públicas era insuficiente, el analfabetismo afectaba a más de la mitad de la población y los edificios escolares presentaban carencias notables, como por ejemplo falta de ventilación, luz, agua corriente, patio o jardín. Según las premisas de Emili Darder, la educación, con implicación de las instituciones públicas, contribuiría a transformar la sociedad para hacerla más justa e igualitaria y mejorando, por lo tanto, la convivencia ciudadana.

Por eso, se propuso el objetivo de llegar a escolarizar el 90 % de la población en edad escolar, a través de reformas en las escuelas existentes y la construcción de nuevos centros que tenían que dar cabida a más de ocho mil escolares.

La Comisión de Cultura promovió el Proyecto de Construcciones Escolares, siendo la financiación su principal dificultad. A pesar de que una parte del presupuesto tenía que ir a cargo del Gobierno central, el Ayuntamiento tuvo que endeudarse, aspecto criticado por los opositores del equipo municipal, y especialmente por los opositores de Darder.

El plan de construcción se impulsó y desarrollar principalmente entre 1931 y 1934, hasta la suspensión del consistorio por orden gubernativa. En este tiempo se mejoró la cifra de escolarizados, se dotó de material y mobiliario los colegios y se crearon mecanismos para controlar el absentismo. Se inició, así mismo, la implantación de servicios de guardería que permitían, especialmente a las madres trabajadoras, poder desarrollar la jornada laboral.

El diciembre de 1933 se inauguró la escuela de Les Cadenes, obra de Porqueras. Fue el primer edificio resultante del plan de construcciones escolares del Ayuntamiento. Entre otros centros, se inauguraron las escuelas de Son Espanyolet, Coll d’en Rebassa, Son Serra y Jaume I.

La Comisión de Cultura se hizo cargo también de las colonias escolares, a las que asistían los alumnos con más necesidades sanitarias o económicas. El objetivo de las colonias, que duraban unos meses, era promover la vida sana a través de actividades al aire libre, entre otros aspectos.

El proyecto educativo, como vemos, contaba con un proyecto de atención sanitaria a la población escolar. En este sentido, se creó el Servicio de Inspección Médico-Higiénica Escolar, encargado de la inspección de los locales escolares, de llevar a cabo revisiones médicas cada año a los estudiantes, etc. Como compiló Janer (1983), Emili Darder diseñó una serie de fichas, redactadas en catalán, para pedir la información necesaria de las condiciones de los locales y del estado de salud de los estudiantes.

Este grado de innovación se evidenció en otros aspectos, como el hecho de que Palma, como destaca Moner (2012), fue la primera ciudad del país que contó con psiquiatra escolar.

Dentro del ámbito cultural, hay que decir que Darder firmó en junio de 1936 el manifiesto «Resposta als catalans», redactado a favor de la recuperación de la lengua y la cultura catalanas en las Illes Balears. Fue firmado por más de cien representantes culturales mallorquines y era respuesta al manifiesto «Missatge als mallorquins», firmado por intelectuales catalanes. Poco después de la firma de «Resposta als catalans» tuvo lugar el golpe de estado, los sublevados acusaron a los firmantes de traición a la unidad de la patria y los consideraron culpables de separatismo. La persecución contra los firmantes formó parte de la política represiva y también de desguace de la cultura mallorquina, empezando por la Associació per la Cultura de Mallorca. La participación de Darder en este proceso fue empleado como argumento en su juicio. Entre los impulsores de la represión destacaron los hermanos Llorenç y Miquel Villalonga.

Durante los años en los que Darder fue edil, su afiliación política pasó del Partido Federal Republicano a Acción Republicana de Mallorca, fundada en 1932 y adherida a la Acción Republicana Nacional de Manuel Azaña. Darder participó en la fundación del nuevo partido y en su expansión territorial, llegando a convertirse en la primera fuerza republicana de Mallorca en 1933. Un año después, Acción Republicana de Mallorca se incorporó a una coalición de fuerzas políticas que dio lugar a Esquerra Republicana Balear, entre cuyas filas también encontramos a Darder; era un partido mallorquinista, de carácter nacionalista y que pretendía influir sobre sectores burgueses y populares.

En diciembre de 1933, en un contexto de llegada de las fuerzas de centroderecha al poder a nivel estatal, presentó su renuncia el entonces alcalde Josep Tomàs Rentería, hecho que llevó a Emili Darder a ser elegido nuevo dirigente del consistorio. Durante esta primera etapa como alcalde, Darder contó únicamente con el apoyo de Acción Republicana y de los socialistas, llegando a enfrentarse con el Gobierno central debido a la regulación de las estancias de extranjeros y la jurisdicción de las costas. Este episodio le causó un enfrentamiento con el comandante militar de las Baleares, Francisco Franco.

A pesar de la oposición, en su primera etapa como alcalde, Emili Darder inauguró centros escolares, dispensarios y depósitos de agua, además de fijar las bases para construir casas para obreros. También impulsó la lengua y la cultura catalanas, tanto a nivel institucional como a través de su uso social.

Los hechos de octubre de 1934 representaron la destitución de Darder como alcalde, que volvió a encabezar el consistorio después de las elecciones de febrero de 1936.

En los escasos meses previos al golpe de estado se retomaron obras públicas, se inauguraron guarderías municipales y dispensarios. Finalizaron las obras del sanatorio de Caubet y se ampliaron algunos comedores escolares.

El 20 de junio de 1936, siendo alcalde Emili Darder, se inauguró el Museo del Castillo de Bellver. Al inicio de la República, en 1931, se había hecho entrega del Castillo a la ciudad por parte del Estado en un acto al que asistió Darder, con Francesc de Sales Aguiló, Francesc Julià y el ministro del Gobierno estatal, Lluís Nicolau de Olwer.

La piedra de la memoria en honor a Darder, ubicada ante el Ayuntamiento, nos sirve de guía para la narración de su vida política. Aún así, y a efectos de no olvidar la perspectiva interdisciplinaria, hay que tener en cuenta otros elementos como las fotografías de época, recogidas entre otros autores por Del Hoyo y Company (2005), o los textos políticos disponibles en La Nostra Terra, entre otras publicaciones de la época.

Espacios vinculados a la vertiente política de Darder

·         Teatre Principal. Desde la Associació per la Cultura de Mallorca se impulsó el Anteproyecto de Estatuto de Autonomía de las Illes Balears. En julio de 1931 se reunió en el Teatre la asamblea de ayuntamientos, entidades y corporaciones que tenían que discutir el anteproyecto. Darder tuvo un papel destacado en la defensa del texto.

·         Escuela Pública de Ses Cadenes. El 25 de diciembre de 1933 se inauguró la Escuela de Ses Cadenes, del arquitecto Porqueras. Era el primer edificio del plan de construcciones escolares del Ayuntamiento de Palma y su inauguración representó el primer acto público oficial de Emili Darder como alcalde de la ciudad en su primer mandato. El edificio también estaba previsto como colonia escolar de verano, dada la ubicación cercana al mar.

·         Depósitos de agua de Son Togores. El 18 de marzo de 1934 se inauguraron dos depósitos reguladores de agua en Son Togores. Las obras se habían iniciado en 1932 y tuvieron un presupuesto de 800.000 pesetas. La canalización de agua representó un eslabón fundamental en el plan sanitario del ayuntamiento republicano.

·         La sede del Partido Republicano Federal de Mallorca (calle de Sanç, 11). Al principio de los años treinta, el Partido Republicano Federal de Mallorca aglutinaba al republicanismo mallorquín. La sede del partido se encontraba en la calle de Sanç, 11, y daba cabida a reuniones y actos de tipo social, político y de ocio. Darder era miembro de la junta directiva del partido en Palma y formó parte de la candidatura entre republicanos y socialistas al Ayuntamiento de Palma en 1931.

·         La sede de Acción Republicana de Mallorca. En febrero de 1932 se constituyó la ARM, resultado de una escisión del Partido Republicano Federal de Mallorca. Darder fue vicepresidente del nuevo partido, que consiguió una implantación destacada en los distritos de Palma y también en los municipios de Mallorca. El 14 de abril de 1933 el partido inauguró una nueva sede en la plaça de la Constitució, 120.

·         La sede de Esquerra Republicana Balear. El 8 de abril de 1934, como consecuencia de la reorganización de las formaciones republicanas de izquierda, se creó ERB. Durante el gobierno del Frente Popular abrió una sede encima del actual Bar Bosch (Company, 2011).

·         Diputación Provincial de Baleares. Además de edil, entre mayo de 1931 (o julio de 1932, según Company, 2011) y hasta su renuncia en marzo de 1934, Emili Darder también fue diputado provincial. Durante estos años, la institución, de carácter supramunicipal, destacó en el fomento de la educación y la cultura (a través de la promoción de bibliotecas, becas, impulso a la lengua catalana…), la beneficencia, la sanidad y el impulso del Anteproyecto del Estatuto de Autonomía, del cual Darder fue firme defensor. Darder realizó varias propuestas de mejora de los establecimientos benéfico-sanitarios y educativos.

 

EMILI DARDER, VÍCTIMA DE LA REPRESIÓN FRANQUISTA

Parada 3. El Castillo de Bellver, centro de reclusión

La mañana del 19 de julio de 1936 el general Manuel Goded proclamaba el bando de guerra mediante el cual asumía el poder y destituía a las autoridades civiles. Con pocas horas de diferencia, Darder sufrió un ataque cardíaco, cosa que no impidió que fuera detenido. Entre el 20 de julio de 1936 y el 24 de febrero de 1937 estuvo como preso en el Hospital Provincial en dos ocasiones; también en el Castillo de Bellver, y su última noche en la Prisión Provincial.

El Castillo de Bellver es uno de los elementos arquitectónicos y patrimoniales que, junto con la Catedral o la Llotja, caracterizan Palma, y por extensión, al conjunto de la isla. Construido a inicios del siglo XIV, siguiendo el estilo gótico, narrar la historia del castillo también es narrar la historia palmesana y mallorquina. Uno de los episodios más trágicos vividos allí es el de la Guerra Civil española, cuando el castillo se convirtió¾nuevamente, ya que con anterioridad hubo servido de prisión para figuras como Jovellanos¾ en prisión.

Con el objetivo de aumentar los espacios de reclusión, el 23 de julio de 1936 las fuerzas rebeldes habilitaron el castillo como prisión. De manera oficial fue prisión hasta el 15 de octubre de 1937, si bien los testimonios orales parecen indicar que incluso a principios de 1939 el castillo sirvió de presidio. Los grafitos en el Patio de Armas y en las cuevas también evidenciarían la presencia de prisioneros más allá de 1937.

El castillo contaba con celdas normales y de aislamiento, espacios de guardia y vigilancia, cantina, cocina, letrinas, duchas y patio. El punto de acceso ¾a través del bosque¾ contaba con una garita vigilada, donde los familiares dejaban la ropa limpia, recogían la ropa sucia y también podían recoger o entregar la correspondencia a sus familiares.

La dirección de la prisión la ocupaba un oficial de prisiones, que se encargaba de coordinar los guardianes, la mayoría militares y personal de prisiones. Un cura de El Terreno ofrecía sus servicios religiosos en Bellver; tampoco había médico permanente, sino que éste se desplazaba de manera periódica o de urgencia.

En relación con el desembarco y la partida del capitán Bayo, la prisión de Bellver vivió una etapa de tensión. Se encerraron a unas sesenta personas de Manacor, Artà y Sant Llorenç des Cardassar, hecho que provocó una sobreexplotación del espacio y un empeoramiento en las condiciones de vida de los prisioneros: amontonados, tenían que compartir jergón para dormir, o buscar espacios como las arcadas del Patio de Armas.

Poco después tuvo lugar en Bellver otro hecho insólito: el 12 de octubre de 1936, y después de una lluvia que destiñó la franja inferior de una bandera rojigualda del bando golpista ¾pasando, por lo tanto, del rojo al morado¾ los prisioneros dieron muestras de befa y alegría. El teniente Gomila disparó al aire y envió los presos a las celdas. Un rato después los hicieron formar a todos y el teniente Gomila eligió tres al azar: Joan Vidal Sureda, Andreu Nicolau Matas y Josep Picornell Porcel. Los fusilaron. Desde aquel momento se convirtieron en habituales los fusilamientos de gente en los alrededores del castillo.

En cuanto a la vida diaria de los reos, eran pocas las actividades posibles: pequeñas paseadas, charlar, dormir... Ahora bien, el descanso era casi imposible, dadas las condiciones del espacio y algunos llegaron a dormir directamente sobre el suelo. Hay que decir, además, que tanto en verano como en invierno las condiciones climáticas en el castillo eran muy extremas, lo que provocaba frecuentes enfermedades.

Algunos presos empezaron a llevar a cabo actividades de formación. Por ejemplo, Ramon Lacomba aprendió a leer y escribir gracias al maestro Rafel Gamero.

En cuanto a la alimentación, se ha podido saber que era de mala calidad, escasa y poco variada.

Las visitas, como espacio de reclusión, no estaban permitidas, de forma que las cartas eran el único vínculo con el exterior. Las cartas llegaban junto con los paquetes de ropa limpia y sucia que las familias hacían llegar a los presos una vez por semana y con un control previo por parte de los guardas de la prisión.

Los prisioneros del castillo, igual que los de otras prisiones, dada la alta presión humana, sufrieron un periplo por varios lugares, como el campo de concentración de Sant Joan de la Font Santa en Campos. Ahora bien, el peor destino serían las sacas de prisión: bajo la apariencia de liberaciones, las sacas serían la fórmula ideada por los golpistas para asesinar de manera extraoficial a personas que después eran declaradas como desaparecidas y así lo notificaban a sus familiares. Muchas víctimas eran prisioneros de carácter gubernativo, lo que significa que no tenían ninguna causa judicial abierta y su vida dependía de la decisión del gobernador civil.

Canyelles y Ferrero-Horrach (2018), que analizaron las condiciones de vida en el castillo durante estos años¾como hemos visto, caracterizados por una alta presión humana y una escasa y mala alimentación¾, nos brindaron un estudio biográfico de los presos y de los grafitos que quedaron grabados en el Patio de Armas. Actualmente, el Castell de Bellver, que sirve de sede al Museo de Historia de la ciudad, cuenta con un espacio expositivo relativo a la Guerra Civil en la Torre de l’Homenatge, donde se recogen los nombres de los presos identificados, fotografías, cartas, dibujos, así como un juego creado por Emili Darder durante su presidio.

Durante los meses en que Darder estuvo tomado su salud empeoró de forma pronunciada, hasta llegar a ser trasladado al Hospital Provincial el 17 de diciembre de 1936.

Durante estos meses, además, sus bienes fueron confiscados y únicamente pudo ver a su mujer en dos ocasiones, una previa a su ejecución.

Entre los recursos didácticos que complementan el Castell de Bellver, además del busto y la piedra de la memoria, disponemos de materiales audiovisuales como los documentales Emili Darder (1895-1937), o Passió d’Emili Darder, que nos ayudan a reconstruir la trayectoria política, social y cultural de nuestro protagonista.

Espacios vinculados al cautiverio de Emili Darder

·         Hospital Provincial. Entre el 19 y el 27 de julio de 1936 y entre el 17 de diciembre de 1936 y el 23 de febrero de 1937 Darder estuvo ingresado, como preso, en el Hospital General. Su mujer y su madre lo iban a visitar desde los bancos de la plaça de la Sang y Darder saludaba desde la habitación.

·         Presó dels Caputxins. La noche del 23 al 24 de febrero de 1937, Darder, que estaba en el Hospital General, fue trasladado a la prisión provincial de los Caputxins. Allí el juez instructor le comunicó la sentencia y el dictamen y después lo condujeron a la capilla para recibir auxilios espirituales. Las últimas horas las pasó muy enfermo, casi moribundo. Hacia las seis de la mañana fue trasladado en coche al cementerio, para ser fusilado.

 

Parada 4. Muro de la Memoria en el cementerio de Palma

El 10 de octubre del 1936 se abrió la causa 978/1936 contra Emili Darder i Cànaves, Alexandre Jaume Rosselló, Antoni Maria Ques Ventayol y Antoni Mateu Ferrer. Varios autores, como Moll (2009), Company (2008) y Moner (2012) han transcrito e investigado el conjunto de la documentación relativa a la causa, que ha llegado a ser novelada por Rosselló (2010). Después de varios meses de instrucción, el Consejo de Guerra tuvo lugar el 15 de febrero de 1937. El defensor de Darder, Eusebi Pascual, rebatió todas las acusaciones que había realizado el fiscal contra el médico y el alcalde, destacando la cuestión religiosa y su consideración como separatista, y apuntó que el sumario se había fundamentado en rumores y acusaciones intencionadas y no probadas.

Aún así, el tribunal consideró los encausados responsables de rebelión y los condenó a pena de muerte. La defensa intentó conseguir el indulto y la familia de Darder pidió clemencia, entre otros, al obispo Josep Miralles, sin éxito. El asesinato de Darder y del resto de los encausados tuvo lugar durante el amanecer del 24 de febrero de 1937, en las tapias del cementerio de Palma y ante un público numeroso. Se contextualiza en una de las etapas de mayor represión por parte de las autoridades rebeldes, caracterizada por las ejecuciones ilegales.

De sus muertes se hizo eco la publicación Mallorca Nova, editada por mallorquines residentes y exiliados en Barcelona durante la Guerra Civil. Los números 1 y 2 de la revista, aparecidos el día 1 y el día 20 de junio de 1937, respectivamente, incorporaron una fotografía de Emili Darder y de Alexandre Jaume, con una comentario y reseña biográfica, en la sección «Els nostres màrtirs». La publicación Mallorca Nova puede ser fácilmente consultada por los interesados a través de la edición realizada por el Ayuntamiento de Palma y presentada en marzo de 2023.

 En una última carta, Emili Darder, con una salud debilitada, se despidió de su mujer e hija:

«Estimadíssima Miqueleta meva: ja veus que em demanin sa pena de mort, a mi, que he estat sempre s’homo més pacífic i més contrari a tota revolució. Si hi ha d’haver justícia no em poden fer res (...). Per mi esteu tranquil·les. Jo només passo pena per tu i per la meva nena. Haver-nos, en tot cas, de deixar, tant com us estimo! I m’apena molt la vostra situació econòmica. Que ma mare i ton pares us emparin (...). T’abraça i et besa fortíssimament i llargament amb tot l’immens amor que et te es teu homo, Emili.» (Company, 2008, pág. 197-198).

Miquela Rovira recibió el cartucho de una bala con la fecha del asesinato de Darder inscrita, con un anónimo en el que se decía que era el mejor recuerdo que podía tener del marido.

Además del embargo de sus bienes, a la mujer e hija de Darder se les prohibió vestir de luto. En marzo de 1937 madre e hija marcharon al exilio a Francia. Volvieron en 1950, y antes vinieron únicamente de viaje para visitar a sus familiares, para que conocieran a sus nietos (Emili Miquel, Ferran y Albert).

Como Lugar de Memoria representativo, el último punto del itinerario consiste en visitar el Muro de la Memoria del cementerio de Palma, promovido por la Associació de Memòria Històrica de Mallorca y el Ayuntamiento de Palma. El espacio, que hace décadas fue escenario de fusilamientos, se reinterpretó y reconvirtió desde la perspectiva del recuerdo y del homenaje para dar lugar al Muro de la Memoria, diseñado por el arquitecto Josep Quetglas e inaugurado en 2011.

El espacio está formato por un jardín y un conjunto escultórico con una plancha de hierro de doce metros de longitud con el nombre o referencias anónimas de más de mil quinientas personas asesinadas, así como una silla de bronce a escala real simbolizando el vacío que dejaron las víctimas a sus familias. Complementan el espacio una réplica a pequeña escala del mural d’en Frau y una placa de mármol blanco con un texto del escritor Llorenç Capellà. Justo es decir que, en este espacio, ya en los años ochenta, se había instalado una placa conmemorativa de los asesinatos.

También en el cementerio de Palma, a escasos metros del muro, encontramos un Árbol de la Memoria, esculpido en hierro y con cinco ramas que representan cada una de las Illes Balears; ante el árbol hay una plaza dedicada a las familias de las víctimas, que durante años iban a las tapias del cementerio buscando prendas de ropa y objetos de los fusilados, para reconocer las pertenencias de sus familiares. Por eso, en la plaza se instaló una escultura realizada con ropa real de las víctimas, dada por los familiares, así como una placa con un texto de la investigadora Margalida Capellà.

Espacio vinculado: tumba de Emili Darder

 

Epílogo

La reivindicación de la obra y legado de Emili Darder se ha hecho visible desde la Transición hasta nuestros días a través de homenajes, búsquedas históricas, publicaciones, documentales… en definitiva, todo un conjunto de iniciativas que han contribuido a hacer visible su tarea en sanidad, educación y cultura.

El octubre de 1976, Josep Forteza-Rey firmó en la revista Lluc un artículo titulado Semblança biogràfica del Dr. Emili Darder Cànaves, donde empezaba diciendo «Permeteu-me, que us parli d’Emili Darder: per uns, desconegut; per altres, oblidat; i per nosaltres, enyorat amb desolació i tristor» (Lluc, 663, pág. 14-18). En estas páginas se hace referencia a la tarea sanitaria, política y cultural de Darder, en una fecha, la de 1976, que marca un punto de inflexión en la reivindicación pública de la memoria democrática. Resulta bastante significativo cómo Forteza-Rey, en su texto, elude dar los nombres del juez instructor, del fiscal y otros miembros del tribunal.

Ahora bien, sin duda, a este texto de carácter biográfico siguieron otros acontecimientos que contribuyeron a hacer visible uno de los oscuros episodios de la historia mallorquina del siglo XX.

Uno de los hitos capitales que se dieron durante los primeros años de transición fue la misa celebrada con motivo de los 40 años de su fusilamiento. Fue una misa ofrecida por su viuda y su hija, en la que el P. Pere Llabrés y Martorell pronunció la homilía «Un missatge per a la reconciliació entre els fills d’un mateix poble», recogida por la revista Lluc en su número 667 (febrero de 1977, pág. 19). Reproducimos un fragmento:

«Avui, una família cristiana de la nostra comunitat ens ha demanat un record, una pregària i l’expressió viva d’un sentiment de perdí, de reconciliació, d’un desig per a la convivència ciutadana i el futur en pau del nostre poble de Mallorca. En un dia molt trist de la història d’aquesta terra nostra, amarada tantes vegades sa la sang i el sofriment dels seus fills, avui fa quaranta anys, vessava la seva sang Emili Darder». (Lluc, 667, pág. 19).

Unos años después, concretamente en febrero de 1983, se llevó a cabo un homenaje a Emili Darder en un Teatro Principal atestado. La iniciativa del acto había correspondido al PSM. Tuvieron que pasar once años desde aquel homenaje multitudinario para que Emili Darder fuera nombrado Hijo Ilustre de Palma, concretamente en 1994.

Alexandre Jaume Rosselló, también fusilado el 24 de febrero de 1937, fue nombrado Hijo Ilustre de Palma en 2016.

Podemos encontrar sus retratos, en ambos casos siguiendo la técnica de aceite sobre tela, en el Ayuntamiento de Palma. El retrato de Darder es obra de Emili Cano López y el retrato de Alexandre Jaume es obra de Ángeles Cereceda.

Darder cuenta también con un instituto de educación secundaria y una calle con su nombre, y Alexandre Jaume es reconocido al otorgar su nombre a una sala del Castell de Bellver y a una plaza de Palma (Avellaneda, 2022).

 

Referencias bibliográficas

-          Avellaneda Artigas, J. (2022). 100 retrats de la Galeria de Fills i Filles Il·lustres. Ajuntament de Palma.

-          Balcells, A. (2008). Llocs de memòria dels catalans. Proa.

-          Canyelles Canyelles, T., Ferrero-Horrach, A. (2018). Bellver, presó franquista. Ajuntament de Palma.

-          CEDOC UIB (2023). Mallorca Nova. Palma: Ajuntament de Palma.

-          Company Mates, A. (2008). Emili Darder Cànaves. El darrer batle republicà de Palma. Ajuntament de Palma.

-          Company Mates, A. (2011). Emili Darder i Cànaves : recorreguts en memòria del darrer batle republicà per conèixer la seva vida i obra.

-          Del Hoyo Bernat, X., Company Matas, A. (2005). Palma 1931-1936. L’evolució de la ciutat a través de la imatge. Institut d’Estudis Baleàrics.

-          Direcció General de Memòria Democràtica del Govern de les Illes Balears. Mapa Stolpersteine - Pedres de la Memòria. Govern de les Illes Balears. http://memoria.illesbalears.cat.

-          Ferrándiz, F. (2011). Lugares de memoria. En Escudero Alday, R. (Coord.), Diccionario de memoria histórica. Conceptos contra el olvido (pág. 27-33). Los libros de la Catarata.

-          Janer Manila, G. (1983). Emili Darder i la política sanitario-escolar de l’Ajuntament de Ciutat en temps de la Segona República. Ajuntament de Palma.

-          Liceras Ruíz, A. (2018). Los itinerarios didácticos en la enseñanza de la geografía. Reflexiones y propuestas acerca de su eficacia en educación. Unes. Universidad, Escuela y Sociedad, 5, pág. 67-81.

-          Moll Marqués, J. (2009). Crònica d’una infàmia: el procés contra Emili Darder, Alexandre Jaume, Antoni Mateu i Antoni Maria Ques. Editorial Moll.

-          Moner Mora, L. (2007). Emili Darder i Cànaves (1895-1937). Vida i martiri. Miquel Font.

-          Moner Mora, L. (2012). Emili Darder i Cànaves (1895-1937). Metge i polític, víctima de la repressió franquista. Fundació Emili Darder.

-          Revista Lluc.

-          Ripoll Gil, E. (2021). La Memòria Democràtica a les aules. Lleonard Muntaner Editor.

-          Rosselló Bujosa, G. (2010). Tacats de sang. Causa 978 de 1936 contra Emili Darder, batlle. Editorial Moll.

-          Serra Busquets, S. (2001). Els elements de canvi a la Mallorca del segle XX. Edicions Cort.

 

Recursos audiovisuales

-          Documental Emili Darder (1895-1937).

-          Documental Passió d’Emili Darder.

 

Webgrafia

-          Ara Balears

-          Vilaweb

-          Fotos Antiguas de Mallorca

-          Última Hora

-          Web Bartolomé Rosselló contratista

 

Nota para el docente:

Las imágenes (las encontraréis en el documento adjunto) pueden ser imprimidas en A4 y usarse, plastificadas, durante el itinerario de la ruta, para ilustrar cada uno de los puntos y contenidos tratados.