La Directiva 2000/60/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 23 de octubre de 2000, por la cual se establece un marco comunitario de actuación en el ámbito de la política de aguas (DOUE L núm. 327, de 22 de diciembre de 2000), también conocida como la Directiva Marc del Agua o DMA, es la norma europea que preside, desde el año 2000, la gestión de las aguas de la Unión Europea y que establece un marco comunitario para la protección de:
El objetivo de la DMA es posibilitar un uso sostenible del agua garantizando a largo plazo la protección de su calidad y la salud de los ecosistemas acuáticos, recuperando y conservando un buen estado ecológico, a través del cumplimiento de los siguientes principios: